jueves, 10 de junio de 2010

derechos de los niños y niñas



Los derechos que poseen los niños, niñas y adolescentes. Todos y cada uno de los derechos de la infancia son inalienables e irrenunciables, por lo que ninguna persona puede vulnerar los o desconocerlos bajo ninguna circunstancia. Varios documentos consagran los derechos de la infancia a nivel internacional, entre ellos la declaración de los derechos del niño. Estos documentos reconocen a los niños como sujetos de derecho, pero convierten a los estados y a los adultos en titulares de la obligación de respetarlos y hacerlos respetar.


La paternidad y la maternidad no deberían ser nunca un producto del azar, de la inconsciencia, de la irresponsabilidad ni mucho menos de la violencia; sino resultado del amor y de un deseo cuyas consecuencias estén tanto el varón como la mujer por igual, dispuestos a enfrentar con entusiasmo, conscientes plenamente de la importancia que alcanza, tanto para ellos como para el país su actitud como padres y madres responsables.


A lo largo de nuestra historia desafortunadamente siempre ha existido un trato injusto para los menores de edad. Tal problema ha hecho reflexionar con seriedad a las personas que integran los diversos organismos tanto públicos como privados, con el fin de lograr que los niños gocen plenamente del respeto a sus derechos y de los beneficios propios de su edad, así como para que se les proteja de su natural vulnerabilidad.


Si bien es cierto que el Estado, a través de sus instituciones, deben velar por el desarrollo de los menores, las necesidades de educación, salud, juego, deporte, imanación, etc., que tiene, también lo es que la formación que en la familia reciben los hijos es insustituible. La familia es la base fundamental de la sociedad, es la organización primaria de la sociedad, que se funda sobre vínculos de parentesco; en su seno nacen, crecen y se forman las nuevas generaciones bajo los valores de la solidaridad, la fidelidad, la fraternidad y la justicia


¿CUAL ES EL ORIGEN DEL DÍA DE LOS NIÑOS Y NIÑAS EN COLOMBIA?


Había una vez, en unas épocas oscuras de la humanidad, que los niños no eran tomados en cuenta. Esta época se llama hoy la Edad Media, y la vivieron muchas personas de Europa. Cuentan que en esos días, la gente vivía en condiciones muy precarias y eran muy pocos los niños que lograban sobrevivir y llegar a la edad adulta. A nadie les importaba los niños y en vez de ir a una escuela, debían ocuparse de las más difíciles tareas, como cortar leña, picar piedra, trabajar en minas. Los papás solían tener muchos hijos, pero trataban de no apegarse demasiado a ellos y era corriente, como en el cuento de Hansel y Gretel, que los vendieran, cambiaran por comida o simplemente los dejaran en la calle donde crecían a su libre albedrío.


Durante muchos siglos a los niños de tres o cuatro años, apenas se los consideraba seres humanos. Afortunada mente los tiempos cambiaron y hoy los niños son considera dos el futuro de la humanidad. En la actualidad, para borrar ese horrible pasado, importantes líderes del mundo se dieron a la tarea de honrar el papel de los niños de la sociedad y desde hace 86 años se creó la figura del Día del Niño.

Los niños y las niñas son muy importantes, porque son el presente y el futuro del país. Por eso los adultos debemos dedicarles más atención, jugar con ellos y aprender lo que pueden enseñarnos cada día. Es importante entender que los niños también construyen el país y merecen que se les abran espacios participación.

La unión de esfuerzos entre todos aquellos que hacen parte del Estado y quieren ayudar a los niños y las niñas, hará que este tema sea tenido en cuenta por vecinos, papás, mamás, profesores, gobernantes, medios de comunicación y todos los adultos que como ciudadanos cumplen la Constitución.

La niñez requiere, en primer término, del amor y comprensión de la familia, así como de la sociedad en general; el equiparlo emocionalmente de amor significa garantizar que en su etapa adulta sea un hombre de bien y solidario con sus semejantes. Las niñas y los niños deben ser protegidos desde antes y después de su nacimiento y, sobre todo, durante su crecimiento; debe protegerse su vida y su salud y asegurarle el efectivo goce de todos sus demás derechos, a fin de garantizarle un desarrollo físico, mental, social y espiritual que le permita la formación de su carácter y personalidad.

El niño debe ser protegido contra las prácticas discriminatorias. Si alguno es diferente al resto de los demás porque habla otro idioma, tiene otros gustos, otras costumbres, otras ideas, otra religión o viene de otro pueblo, no debe hacerle sentir inferior o extraño, tiene los mismos derechos que los demás. Cualquiera que sea el color de la piel, de sus ojos o de su cabello, tiene derecho a ser respetado. Debe ser educado en un espíritu de comprensión, tolerancia, amistad entre los pueblos, paz y fraternidad universal y con plena conciencia de que debe consagrar sus energías y aptitudes al servicio de sus semejantes.


El niño debe ser protegido contra toda forma de abandono, crueldad y explotación. No deberá permitirse al niño trabajar antes de una edad mínima adecuada y, en ningún caso se le permitirá que se dedique a alguna ocupación o empleo que pueda perjudicar su salud o su educación o impedir su desarrollo físico, mental o moral.


El niño tiene derecho a recibir educación, que será gratuita y obligatoria por lo menos en las etapas elementales. Se le debe dar una educación que favorezca su cultura general y le permita desarrollar sus aptitudes y su juicio individual, su sentido de responsabilidad moral y social, para llegar a ser un miembro útil a la sociedad. El niño debe disfrutar de juegos y recreaciones.


Los niños, para el pleno y armonioso desarrollo de su personalidad, necesitan de amor y comprensión. Siempre que sea posible deberán crecer bajo el cuidado y responsabilidad de sus padres; salvo casos excepcionales, no deberá separarse al niño de corta edad de su madre. La sociedad y autoridades, tienen la obligación de cuidar especialmente a los niños sin familia o que carezcan de medios adecuados de subsistencia.


El niño tiene derecho a disfrutar de los beneficios de la Seguridad Social, por lo tanto de alimentación, vivienda, recreo y servicios médicos adecuados. Los cuidados especiales que se le brinden al menor y a su madre, deben garantizar se desde antes de su nacimiento. prevé que el niño gozará de protección especial y podrá disponer de las oportunidades y servicios que le permitan desarrollarse en forma sana y normal, en condiciones de libertad y dignidad a fin de crecer no sólo física, sino también mental, moral y social mente.


Los niños con alguna enfermedad o discapacidad física o mental, deben recibir tratamiento, educación y cuidados especializados. Pueden aprender muchas cosas si se les dedica atención y cuidados adecuados. Establece que los derechos enunciados en la Declaración serán reconocidos a todos los niños sin excepción alguna. El niño tiene derecho desde su nacimiento a un nombre y a una nacionalidad. Los niños deben ser los primeros en recibir protección y socorro.



BIBLIOGRAFÌA

  • www.google.com
  • www.wikipedia.com